50 mil Familias Padecen las Consecuencias.
La situación financiera de Altos Hornos de México (AHMSA) ha llegado a un punto crítico, dejando a la empresa al borde de la bancarrota. La deuda millonaria de Alonso Ancira, presidente del consejo de administración, con Pemex por la venta de una planta de fertilizantes a sobreprecio, sumada a saldos pendientes con la Comisión Federal de Electricidad y proveedores privados, ha forzado al empresario a desprenderse del negocio.
Desde hace cuatro meses, al menos 19 mil trabajadores y sus familias sufren las consecuencias directas de esta crisis, sin recibir salarios ni prestaciones. Organismos empresariales estiman que la crisis afecta a al menos 50 mil familias en total.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su preocupación: "Tienen una deuda enorme los dueños, y han dejado sin trabajo a mucha gente, e incluso hay proveedores que no han cobrado".
Este colapso económico ha generado un interés significativo entre los empresarios del país. La idea de adquirir AHMSA se percibe como ambiciosa, considerando que la empresa es la principal productora de acero en México y una de las más importantes del continente.
Alejandro Gutiérrez, presidente de Canacintra Torreón, manifestó en entrevista: "De una manera u otra, debe resolverse esa situación, por el bien de la economía del estado, por el bien del costo del acero a nivel nacional". Gutiérrez subrayó la importancia del acero en el sector metal-mecánico de Coahuila y destacó que la resolución de la crisis es fundamental para todos.
En relación con posibles inversionistas, Gutiérrez reveló que ha habido pláticas con empresarios ajenos a Alonso Ancira, propietario de AHMSA, interesados en invertir en la acerera coahuilense, que se mantiene en paro desde principios de año. Se estima que la empresa tiene un valor de 500 millones de dólares.
"Para Altos Hornos, esta ayuda es un buen primer paso, pero en realidad la rehabilitación de la empresa vendrá de la aportación de capital nuevo", afirmó Gutiérrez. Sin embargo, mientras persistan las diferencias políticas entre el gobierno mexicano y AHMSA, la situación de la empresa continuará deteriorándose, planteando un desafío crucial para su futuro y el bienestar de miles de familias afectadas.