Los estados de Coahuila, Chihuahua y Nuevo León se mantienen libres del gusano barrenador, plaga que ha afectado ya a siete entidades del país. Así lo informaron líderes ganaderos de la región, quienes también urgieron a las autoridades federales y estatales a intensificar los esfuerzos para evitar que la plaga se propague hacia el norte.
Abel Ayala Flores, presidente de la Unión Ganadera Regional de Coahuila, destacó que gracias al estricto control sanitario en las fronteras terrestres, hasta el momento el ganado local no ha sido afectado. No obstante, alertó que es necesario establecer una zona de contención, luego de que el gusano rebasara el Istmo de Tehuantepec, donde se suponía estaba contenido.
Por su parte, Noel Ramírez, dirigente del gremio ganadero en Nuevo León, aseguró que en su entidad se han blindado los centros de verificación del oriente y sur, aunque advirtió que el riesgo persiste si no se refuerzan los filtros sanitarios en las rutas clandestinas utilizadas para el contrabando de ganado.
Las declaraciones se dan en el marco del acuerdo entre México y Estados Unidos para implementar una estrategia conjunta contra la plaga, la cual deberá mostrar resultados en un plazo de 60 días. De ello dependerá una eventual reapertura de la frontera para la exportación de ganado.
Ayala insistió en la necesidad de regionalizar al país y establecer zonas de amortiguamiento que protejan a los estados exportadores. Afirmó que la Confederación Nacional Ganadera y las entidades involucradas participan activamente en las negociaciones bilaterales con autoridades estadounidenses.