El cierre parcial del Gobierno estadounidense, que ya se extiende por más de 40 días, comenzó a sentirse
Con más de 1,600 vuelos cancelados y 3,300 retrasos este lunes,10 de noviembre, la crisis de controladores aéreos alcanzó un punto crítico, afectando a millones de pasajeros y desatando una nueva polémica entre el presidente Donald Trump y los trabajadores del sector.
La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó que redujo hasta un 10% del tráfico aéreo nacional debido a la falta de personal, mientras muchos controladores continúan laborando sin recibir salario desde el inicio de la parálisis federal.

Otros, sin poder sostener sus gastos, se han visto obligados a ausentarse alegando enfermedad
Amenazas y recompensas desde la Casa Blanca
Ante el colapso de operaciones, Trump recurrió a su red social Truth Social para lanzar un ultimátum: "¡Todos los controladores deben volver al trabajo, YA!".
El mandatario advirtió que quienes no se reincorporen sufrirán reducciones salariales, mientras prometió una bonificación de 10,000 dólares (aprox. 184 mil pesos) a quienes "no se tomaron ningún día libre".
El presidente responsabilizó a los demócratas por el cierre, al que calificó de "farsa", y aseguró que los ausentes dejarán una "mancha negativa" en sus expedientes.

"Si desean dejar el servicio, háganlo sin pago ni indemnización. Serán reemplazados por verdaderos patriotas", escribió
Cielos tensos y trabajadores exhaustos
Según el sindicato de controladores, la plantilla nacional opera con 3,800 empleados menos de los necesarios.
Aun así, durante el fin de semana pasado lograron mantener en vuelo a más de 7,3 millones de pasajeros, cifra que evidencia el nivel de presión sobre un sistema ya debilitado.

El presidente de la Asociación Nacional de Controladores Aéreos, Nick Daniels, pidió al Congreso acelerar la aprobación del nuevo acuerdo presupuestario para evitar que la crisis se agrave con la llegada del Día de Acción de Gracias, una de las temporadas más intensas del año en los aeropuertos
Una crisis política que aterriza en los aeropuertos
La paralización del Gobierno, la más larga en la historia de Estados Unidos, espera una resolución tras la aprobación del Senado de una medida temporal de financiación que ahora debe ser votada por la Cámara de Representantes.
El nuevo límite propuesto, hasta el 30 de enero, mantiene la incertidumbre sobre cuándo se normalizarán los pagos y el servicio aéreo.

Mientras tanto, miles de viajeros enfrentan retrasos y aeropuertos saturados