En respuesta a la convocatoria para la marcha del 15 de noviembre, en la que originalmente se convocó a los jóvenes de la generación z (nacidos a finales de los años 90 y principios de los dos mil), laguneros y laguneras de todas las edades se reunieron en la alameda Zaragoza para marchar en una manifestación pacifica hacia la presidencia municipal de Torreón.

El contingente que se reunió a las 10 de la mañana portaba banderas, sombreros, pancartas y prendas en color blanco para condenar el asesinato de Carlos Manzo, presidente municipal de Uruapan, Michoacán, condenar la violencia generalizada que vive el país y para pedir la destitución de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.

Los ciudadanos aseguraron que era una marcha completamente apartidista y a pesar de que no se observaron tantos jóvenes de la "generación z", como se mencionaba en redes sociales, los manifestantes aseguraron ser ciudadanos cansados de la inseguridad en el país y del hartazgo político.
El contingente realizó un mitin en la presidencia municipal de Torreón, en donde algunos, con micrófono en mano, expusieron sus quejas en contra de las políticas públicas implementadas por el gobierno federal.

La marcha fue resguardada por elementos de tránsito y vialidad para evitar accidentes y no se presentaron mayores incidentes dentro de la marcha que inició a las 10 de la mañana.