Este primero de diciembre se cumple un año del fallecimiento de Leobardo, un menor de 13 años que perdió la vida tras un accidente de tránsito en la carretera a San Antonio, luego de que un trabajador de una empresa contratista de la Termoeléctrica Adolfo López Mateos invadiera el carril contrario. El hecho conmocionó a la comunidad, que desde entonces ha exigido responsabilidades claras y una investigación efectiva.
A un año del accidente, los padres del menor denuncian que no han obtenido justicia y que el responsable continúa prófugo, sin que la carpeta de investigación registre avances significativos. Señalan que, a pesar del tiempo transcurrido, no han recibido información precisa por parte de las autoridades sobre el seguimiento del caso ni sobre los motivos por los que no se ha logrado dar con el responsable.
Los familiares exigen que se haga justicia por la muerte de su hijo y cuestionan que el conductor involucrado no fuera puesto a disposición de las autoridades en el momento del accidente, aun cuando cuerpos de emergencia y seguridad llegaron al sitio mientras este aún se encontraba presente. Ante este escenario, la familia insiste en que las autoridades deben actuar con firmeza para evitar que el caso quede en la impunidad.