El centro de acopio instalado frente a una papelería sobre la calle Vicente Guerrero, en la zona centro, por madres de familia y personal de una guardería, es uno de los varios puntos habilitados para recibir víveres destinados a las familias más afectadas tras las inundaciones en la zona norte.
La iniciativa surgió después de que una madre de familia, quien trabaja como maestra en el municipio de Álamo, uno de los más golpeados por la contingencia, presenciara los daños en la región y decidiera actuar junto con otras madres y el personal de la guardería, sumándose así a los esfuerzos de ayuda.
De acuerdo con el testimonio de las voluntarias, quienes ya realizaron una primera entrega en comunidades del Álamo, aunque muchas personas han mostrado solidaridad y se ha recibido apoyo, la ayuda aún no es suficiente frente a la magnitud de los daños. Por ello, hicieron un llamado a la sociedad civil para continuar colaborando, ya sea con la donación de víveres o, de ser posible, asistiendo a los centros de acopio y apoyando en las labores de limpieza y recuperación.