"Estas flores, estos labios pintados, se los pintó mi hija, una niña que a los siete años fue abusada sexualmente, entonces quiero decirle a ese presidente que cómo se indigna por este cuadro, por qué no se indigna cuando abusaron de mi hija".
México está pasando por un momento histórico, mujeres y familiares víctimas de feminicidios y desapariciones tomaron las oficinas de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) exigiendo al gobierno de México esclarecer los feminicidios y encarcelar a quienes hoy en día gozan de impunidad a pesar de ser señalados por las víctimas de cometer delitos de abuso sexual y feminicidios.
Esto pasa en el centro del país... (colocar imágenes de la toma de la CNDH) ? pero en la entidad chiapaneca, aún hay casos sin esclarecerse, un ejemplo de ellos, es el feminicidio de la joven de 21 años, Karla Yesenia Gómez, quien habría formado parte del equipo de campaña de Carlos Penagos -aspirante a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez en 2018- y quien habría salido con sus mismos compañeros, desaparecido y un día después hallada sin vida.
Sus padres ?hasta el momento- no han obtenido respuesta de las autoridades, ni recibieron una disculpa ni ayuda del exdiputado chiapaneco.
Pero este no es el único caso en la entidad, hasta la fecha, la mamá de la pequeña Kimberly, una niña que fue asesinada dentro de su guardería de la Sedesol en 2016 y hasta hoy en día, su caso sigue impune.
"si protestamos pacíficamente no nos hacen caso, si nos hincamos ante el presidente, que ya ha pasado, tampoco les hace caso, ahora tampoco pareciera, aquí en Chiapas tampoco hace presión, desgraciadamente siguen habiendo familias que siguen sin poder tener un acceso real a la justicia? casi siempre se deja libre a los agresores? no sé qué pasaría acá si nosotras nos animáramos a hacer eso mismo".
Y aún, ante la falta de justicia para madres y familias en Chiapas y en todo el país, ante la falta de capacidad por parte de las instituciones encargadas de resolver estos casos, el presidente de la República y un alto número de personas siguen señalándolas con delincuentes y califican su movimiento como vandalismo, cuando lo único que exigen es que los responsables de cometer delitos en contra de mujeres, obtengan sanciones ejemplares, pues han agotado todas las instancias y se han manifestado de manera pacífica sin obtener respuestas.