Como en todo el país, en Chiapas el sistema penitenciario atraviesa una crisis.
Generada por la corrupción, violencia interna y hacinamiento, provocada por la sobrepoblación.
En 2024, el INEGI reportó un total 23 mil 119 personas privadas de su libertad, que incluye centros estatales y federales.
En Chiapas hay 17 centros penitenciarios en total, 14 estatales y uno federal, ubicado en Villa Comaltitlán, mientras que dos más son especializados en tratamiento o internamiento para adolescentes y se encuentran ubicados en Tapachula y Berriozábal.
Activistas y diferentes asociaciones, han documentado este problema, donde las cárceles no son espacios para reinserción social, convirtiéndose en escuelas del crimen, además, de las malas condiciones en las que se encuentran.
"A groso modo se puede ver que las condiciones obviamente no son óptimas, las instalaciones son viejas, los ventiladores son viejos, tú te has de imaginar en ese calor en ese frío por lo que tienen que pasar".
El presupuesto para estos centros, de acuerdo al INEGI, es de 567 millones de pesos.
"En servicios no se ve invertido, tú puedes visitarlo, puedes pedir un día permiso y te puedes dar cuenta en qué condiciones están, yo no veo, sobre todo en el sexenio pasado que se haya invertido un peso en esos centros".
Los tres centros de reinserción social en Chiapas, que más sobrecupo tienen, son "El Amate", ubicado en el municipio de Cintalapa, cuya capacidad es para 1,780 internos, presenta una sobrepoblación de 278 personas, 16.6% más.
El número 3 en Tapachula, con capacidad para 910 internos, alberga 1,288, con una sobrepoblación de 378 personas, 41.5% más.
Mientras que el número 5 de San Cristóbal de Las Casas, la capacidad es de 276 y tiene una sobrepoblación de 327 personas, 118% más.
Dicha sobrepoblación, generó, que al menos en el sexenio de Rutilio Escandón, asociaciones civiles las visitaran.
"Nadie llegaba a los ceresos, de verdad, más que unas iglesias y hoy en día, están llegando otros voluntariados, gubernamentales, privados".
Un caso de corrupción al interior de una penal, es el de Yudiel Flores, conocido como el "Coyote Consentido", quien enfrentaba una pena de más de cien años.
Que a pesar de estar recluido en el cereso "El Amate", por el delito de explotación, pornografía infantil y violación agravada contra una menor, seguía cometiendo estos crímenes.
El 14 de abril de 2025, fue encontrado estrangulado en su celda, por estos hechos, fueron detenidos cuatro custodios, quienes se presumen eran los facilitadores de ingresar menores de edad a la celda de Yudiel Flores.
Ese hecho generó, que las autoridades de seguridad de la nueva administración estatal, se replantearan la situación que se vive en los ceresos de Chiapas.
"Todos los días se hacen revisiones donde se han encontrado celulares, donde por su puesto se han encontrado diferentes cosas".
Pese a las condiciones de los ceresos en Chiapas, a inicios de septiembre de este 2025, 30 presos de alta peligrosidad, fueron trasladados desde Sinaloa hasta Villa Comaltitlán.
Mientras que en julio con 39 internos del penal "El Amate" fueron llevados a otros centros penitenciarios.
"Lo que queremos es que haya una reinserción social que no sean las cárceles, estos centros, una escuela de delincuentes".
La situación de los Centros de Reinserción Social en Chiapas es crítica, se vulnera los derechos humanos de las personas privadas de la libertad, esta condición genera problemas de salud, estrés, y una violación del derecho a condiciones de detención dignas.