La "depresión invernal o de fin de año", es un padecimiento que afecta a algunas personas y aunque su prevalencia es baja, pues se estima que afecta entre el 1 y 10 por ciento de la población, si no se trata, las consecuencias podrían ser graves.
"Triste e irritable y aparte me sienta lento, no pueda concentrarme bien, pensamientos negativos".
En las fiestas decembrinas, las familias y amigos acostumbran a reunirse, no obstante, no todas las personas se sientes cómodas con las presiones sociales o alegres por las ausencias familiares.
"Muy tristes, más que mamá murió un 31 de diciembre, como que toda esa tristeza se acumula".
La señora María perdió a su madre previo a la celebración de año nuevo, y aunque al principio este suceso fue muy fuerte para su familia, ha sido un motivo más de reunión familiar.
"Es cuestión que estemos todos reunidos y unidos a la vez? cobijarlo, si está muy triste cobijarlo".
La depresión invernal o "trastorno afectivo estacional" (TAE), se intensifica a finales del otoño e invierno y está influenciada por varios factores, entre ellos, la reducción de la luz solar natural, Presión Social y Expectativas, Estrés y Dificultades Económicas, entre otros.
Factores Estacionales:
"Los días son un poco más cortos, tenemos menos exposición a la luz, esto sí puede afectar a nuestro estado de ánimo? depresión estacional, trastorno afectivo emocional, depresión invernal".
Los síntomas pueden variar, pero los más frecuentes incluyen: tristeza profunda o desesperanza, irritabilidad o hipersensibilidad (a las luces navideñas o a la gente), aislamiento social y rechazo a participar en actividades festivas, cambios en los patrones de sueño (dormir demasiado o insomnio), alteraciones en el apetito, alta de energía, fatiga o desinterés en actividades cotidianas.
"Siempre que llegaba diciembre, mi mamá, mi abuelita se ponía más triste, nostálgica, y a mí me pasa lo mismo? debemos tener en cuenta que puede estar relacionado con factores genéticos".
Dentro de las recomendaciones que realizan especialistas, se encuentra el establecer límites; mantener rutinas saludables, pero, sobre todo, buscar ayuda profesional si los síntomas persisten por más de dos semanas o si hay pensamientos suicidas,
"Se presenta en mayor frecuencia en mujeres comparado con hombres, casi el doble".
Por ello, es fundamental consultar a un especialista en salud mental, pues la depresión es tratable y el 90 por ciento de los casos pueden mejorar con el tratamiento adecuado.