Asimismo, los afectados piden al gobierno federal la liberación de los que consideran presos políticos, al tiempo de denunciar abuso sexual en contra de las mujeres que están encarceladas en la prisión del Amate.
El pasado 9 de abril,
los desplazados de Tuxtla Gutiérrez decidieron instalar un campamento a las
afueras de Palacio Nacional, con el cual buscan llamar la atención de las
autoridades y así poder ser tomados en cuenta, aspecto que hasta el momento no
ha tenido efecto alguno.