La recolección de basura se encuentra paralizada en más de 50 municipios del centro del estado, debido a un bloqueo realizado por transportistas en el acceso principal del relleno sanitario regional de Nogales, conocido como "Colorines".
La protesta comenzó alrededor de las 7:00 de la mañana del pasado martes, cuando integrantes de los sindicatos FATEV, CROM, CROC y CATEM impidieron el ingreso de camiones recolectores al sitio de disposición final. Los manifestantes exigen ser considerados para la contratación en el manejo y traslado de residuos sólidos, argumentando que actualmente se privilegia a operadores foráneos.
El conflicto se originó tras la falta de acuerdos entre los representantes sindicales y la administración del relleno sanitario. Ayer, los dirigentes sostuvieron una reunión con el titular de la Secretaría de Trabajo, Previsión Social y Productividad (STPSP), Luis Arturo Santiago, en Xalapa, sin que se alcanzaran compromisos concretos.
Como medida de presión, los transportistas movilizaron al menos 40 camiones de volteo para bloquear el acceso principal al relleno, lo que ha provocado la suspensión del servicio de limpia pública en municipios como Orizaba, Córdoba, Ixtaczoquitlán, Huatusco, Coscomatepec, Paso del Macho y Zongolica, entre otros.
El director de Limpia Pública de Nogales, Mario Rodríguez Mellado, advirtió que la situación es crítica, ya que sólo ese municipio genera unas 18 toneladas de residuos al día, mientras que ciudades más grandes como Córdoba y Orizaba producen volúmenes aún mayores. Hasta el momento, no se ha emitido una postura oficial por parte de la empresa operadora del sitio.
Ante la acumulación de desechos, autoridades municipales han exhortado a la población a no sacar la basura a las calles, con el fin de evitar afectaciones sanitarias y ambientales.
Los manifestantes reiteraron su exigencia de ser incluidos prioritariamente en los contratos laborales vinculados a la operación del relleno sanitario, al considerar que se trata de una fuente de empleo legítima para trabajadores de la región.
Mientras tanto, la población permanece a la espera de una solución por parte de las autoridades estatales y municipales que permita restablecer el servicio de recolección.