La furia del río Papaloapan, desbordado por las intensas lluvias de los últimos días, arrasó con el ganado de decenas de productores locales. Las imágenes muestran a los animales siendo arrastrados por la corriente mientras sus dueños observan impotentes cómo se pierde el fruto de años de trabajo y el sustento de sus familias.
El desastre no solo representa pérdidas materiales, sino también un profundo golpe emocional para la comunidad, cuya economía depende directamente de la actividad ganadera. La creciente del río, provocada por las intensas precipitaciones y el desfogue de presas en la región, dejó escenas desoladoras y puso de manifiesto la vulnerabilidad de quienes habitan las riberas del Papaloapan.
La Secretaría de Protección Civil de Veracruz, en coordinación con autoridades municipales, desplegó un operativo de atención integral. Se activaron albergues temporales y se brindó asistencia humanitaria a las familias afectadas. Además, se realizaron recorridos para evaluar los daños en viviendas, infraestructura y actividades productivas, incluyendo la ganadería. Las autoridades aseguraron que ninguna comunidad quedó incomunicada y continúan monitoreando los cauces para emitir alertas oportunas.
Este evento subraya la importancia de reforzar los sistemas de prevención ante fenómenos naturales y de implementar medidas de adaptación al cambio climático, así como de fortalecer el apoyo a los productores rurales que dependen de su ganado como sustento principal.