Embarazo infantil:Una deuda pendiente con las niñas

Recientemente se hizo viral una lista con datos de la Secretaria de Salud, donde se detallan los 30 nacimientos en México con las madres más jóvenes y la edad del padre, que en su mayoría se trata de hombres mayores, en el caso de las menores sus edades oscilan entre los 10 y 15 años.

Durante 2024 en Veracruz se registraron 615 embarazos en menores de entre 10 y 14 años de edad.

En México, la maternidad en edades tempranas no solo representa una problemática de salud pública y pobreza estructural, sino una crisis silenciosa de derechos humanos. Cada año, miles de niñas y adolescentes se convierten en madres, muchas veces en condiciones de violencia, desigualdad y desprotección institucional.

La Abogada Especialista en Materia de Género, Martha Márquez Hernández, destacó la importancia de la prevención.

"debe haber más presupuesto para el tema de salud y para políticas publicas enfocadas en la prevención primero que nada y de ahí partir hacia los protocolos adecuados?. La realidad es que todavía tenemos mucha comunidad indígena en donde hay prácticas en donde venden a las niñas y que terminan siendo víctimas de abusos sexuales"

Detrás de estas cifras se oculta una realidad profundamente alarmante: en la mayoría de los casos, la maternidad infantil es resultado directo de abuso sexual y casos de pederastia. Sin embargo, esta violencia está amparada por el silencio, el estigma y la impunidad.

El informe revela que, en 2024, la madre más joven fue una niña de 10 años y el papá de 32 años, este caso se registró en Texcoco, Estado de México.

Veracruz destaca con tres casos, uno de ellos ocurrido en Jáltipan con una niña de 11 años y el padre de 44 años, uno más en Xalapa con una madre de 12 y el padre de su hijo de 50 años y en Río Blanco, una menor de 15 años y un hombre de 72 años.

"se trata del delito de pederastia que si esta penado por el código penal de Veracruz o en el delito de estupro El estupro, en términos legales, se refiere a la comisión de actos sexuales con una persona menor de edad, generalmente mediante engaño, seducción o aprovechamiento de una situación de vulnerabilidad"

En términos legales se trata de abuso infantil, incluso cuando la relación haya sido presentada como aparentemente "consensuada", ya que una niña no tiene la capacidad emocional para otorgar un consentimiento.

Aunque las niñas embarazadas son atendidas en su mayoría en hospitales públicos, no se investiga al padre, ni se castiga el abuso.

La Activista, Belem Palmeros Exsome, señaló que este delito debe ser castigado con cárcel.

 "el sector salud es el primer contacto, se atiende a las niñas y ellos deberían de canalizar el delito, la mayoría de estas niñas son víctimas de violencia? por otra que esta haciendo el DIF estatal es el que debería estar investigando"

Es urgente transformar las estructuras legales, sociales y culturales que permiten que una niña sea madre mientras su agresor permanece libre, impune y, en muchos casos, incluso legitimado por la comunidad. La infancia no debe ser escenario de maternidad, sino de protección y derechos.