La inflación general en México bajó a 3.63% interanual durante la primera quincena de octubre, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Esta cifra es menor al 3.76% registrado en septiembre y está por debajo del 4.21% con el que cerró 2024, aunque sigue un poco por encima de la meta del 3% del Banco de México.
En comparación quincenal, el índice de precios al consumidor (IPC) creció 0.28% respecto a los 15 días anteriores. Para entenderlo de manera sencilla: si un kilo de carne costaba 150 pesos hace dos semanas, ahora costaría aproximadamente 150.42 pesos. En la misma quincena de 2024, la inflación había sido de 0.43% quincenal y 4.69% interanual.
El índice de precios subyacente, que elimina productos de alta volatilidad como alimentos y combustibles, creció 0.18% quincenal y 4.24% interanual. Dentro de este índice, las mercancías aumentaron 0.09% quincenal y 4.06% anual, mientras que los servicios subieron 0.26% quincenal y 4.42% interanual. Esto quiere decir que cosas como ropa, transporte o servicios domésticos han subido poco en el último año.

Por otro lado, los precios no subyacentes, que incluyen alimentos, energéticos y tarifas controladas por el gobierno, subieron 0.64% quincenal y 1.58% anual. Por ejemplo, el precio de la electricidad o la gasolina aumentó más que el de los productos de la canasta básica. Dentro de este grupo, los productos agropecuarios bajaron 0.77% quincenal, pero subieron 1.06% anual, como algunas frutas y verduras que se encarecieron respecto al año pasado.
Los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno aumentaron 1.79% en la quincena y 1.99% anual. Esto significa que, si la luz costaba 1,000 pesos hace dos semanas, ahora podría costar 1,017.9 pesos.
El índice de precios de la canasta de consumo mínimo, que considera 170 productos y servicios básicos como alimentos, transporte y servicios, subió 0.31% quincenal y 3.70% anual. Es decir, los hogares que compran solo lo necesario han visto un aumento moderado en su gasto mensual.
Para ponerlo en contexto histórico, la inflación cerró 2024 en 4.21%, por debajo del 4.66% de 2023, del 7.82% de 2022 y del 7.36% de 2021, ambos años con los niveles más altos de las últimas dos décadas. Esto muestra que, aunque los precios siguen subiendo, lo hacen de forma más controlada que hace unos años.
El Banco de México, con el fin de mantener la inflación bajo control, redujo en septiembre la tasa de interés al 7.5%, en su décimo recorte consecutivo y segundo de 25 puntos base. Esta medida busca estimular la economía mientras se mantiene la estabilidad de precios.
En resumen, la primera quincena de octubre muestra que la inflación sigue bajando, pero todavía por encima del objetivo oficial, con aumentos más moderados en alimentos, servicios y energía, afectando de manera directa el presupuesto de las familias mexicanas.