Tierra Perforada: El imperio del huachicol en Veracruz
En los últimos años, el robo de combustible se ha convertido en una de las actividades ilícitas más preocupantes del país. Veracruz, por su ubicación estratégica y su extensa red de ductos, ha sido blanco constante de este delito, que se ha consolidado como una estructura criminal con fuertes implicaciones económicas, sociales y ambientales.
De acuerdo al Observatorio Ciudadano del Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM).
De enero a marzo de 2025 se detectaron 58 tomas clandestinas
Durante 2024 en el estado se detectaron 145 tomas clandestinas de hidrocarburo. Aunque la cifra es menor a comparación con 2023 que se localizaron 214 tomas clandestinas, es reflejo de que la problemática continúa presente.
La entidad se posicionó en el lugar número 12 de 32 de los estados con más tomas clandestinas detectadas durante el 2024.
Hidalgo 2,450 tomas clandestinas
Jalisco 1,894
Tamaulipas 1,117
Guanajuato 850
nuevo león 773
Querétaro 724
México 547
Coahuila 544
Puebla 517
Baja California 469
Chihuahua 154
Veracruz 145
Durante 2024, la entidad se posicionó dentro de los primeros 12 estados con más robos de este producto.
En lo que respecta al Gas LP, Veracruz mostró una disminución significativa pues en 2024, se registraron 205 tomas clandestinas, 79 por ciento menos que en 2023.
El analista político, Carlos Ronzón Verónica, señaló que es responsabilidad de la Sedena atender esta problemática.
"La Sedena anda en todo menos en lo que debe de estar, en el robo del combustible que se trata de una grave problemática en Veracruz y que se da principalmente en los municipios del centro del estado, el colmo es que esta clase de delito está a la vista de todos, vas y preguntas y cualquiera te dice donde venden huachicol y ni así, las autoridades logran disminuir el delito".
Recientemente, autoridades resguardaron una refinería clandestina en la que se fabricaba combustible en el municipio de Coatzacoalcos.
Tras el cateo, se informó sobre la recuperación de 500 mil litros de petróleo crudo, además de la infraestructura para la producción de combustibles destinada al mercado ilícito.
Aunque es una problemática que ha ido a la baja, este delito en Veracruz es profundo, complejo y multifactorial. No se trata solo del robo de combustible, sino de una cadena de consecuencias que van desde pérdidas millonarias hasta el empoderamiento de grupos criminales y el deterioro del tejido social.
