Al grito de "¡volovanes!", los vendedores recorren las playas y zonas turísticas ofreciendo este delicioso manjar jarocho.
Durante la temporada de Semana Santa, uno de los bocadillos más buscados por turistas y locales en la costa de Veracruz es el tradicional volován, un platillo emblemático que se ha convertido en un símbolo gastronómico de la región.
Está elaborado con masa de hojaldre crujiente y relleno con variedades como jamón con queso, jaiba, piña, atún, choriqueso y pollo, entre otros.
Gonzalo Jiménez, comerciante que ofrece sus volovanes en la zona de la Playa de Villa del Mar una de las más visitadas de la ciudad, dijo que en estas fechas la demanda se incrementa vendiendo hasta 120 volovanes al día.
"Gracias a Dios sale el volován ¿Cuántos haces diarios? 120 ¿Y todos se venden?Todos se acaban ahorita gracias a Dios en la playa", dijo.
El volován, conocido también como hojaldre o paste en otras ciudades, es un desayuno rápido y económico muy popular entre estudiantes, trabajadores y visitantes.
En el primer cuadro de la ciudad, en el centro histórico se pueden encontrar hasta 20 comerciantes que ofrecen distintas especialidades, con un precio que va desde los 25 hasta los 30 pesos.
Gonzalo desde hace 5 años se dedica a vender los volovanes en la zona de playa, acudiendo todos los días acude con su canasta para llevar el sustento a su familia.
