Denuncia director de la Prepa Juárez cese “abusivo” por queja

El ahora exdirector del Colegio Preparatorio de Xalapa (CPX), Luis Manuel González García, denunció que fue cesado de manera arbitraria por la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), tras una queja interpuesta por una madre de familia por una actividad pedagógica que consiste en recibir con un saludo o abrazo a los estudiantes al ingresar al plantel.

En conferencia de prensa, acompañado por su abogado Roberto Pablo Mercado, así como por padres de familia y alumnos, González García explicó que dicha práctica ha sido implementada desde hace cuatro años y no es obligatoria, ya que cada estudiante elige si desea dar un abrazo, estrechar la mano, chocar el puño o simplemente saludar.

"La actividad está escrita, es técnico pedagógica, de recibir a los alumnos en la puerta. Para esta persona eso constituía acoso sexual. Nosotros acreditamos que no había tal cuestión; sin embargo, la Secretaría respondió que basta el dicho de una madre, aun cuando las evidencias son contrarias, para aplicar la máxima sanción", afirmó.

El profesor negó que existiera algún acto de acoso sexual y señaló que la carpeta de investigación abierta en la Fiscalía General del Estado no es por delitos sexuales, sino por violencia de género relacionada con un proyecto escolar que la alumna no pudo concluir.

González García sostuvo que su cese no solo le fue notificado de forma sorpresiva, sino que también fue separado de sus plazas docentes, en las que asegura haber trabajado durante 32 años sin antecedentes negativos. "Fue un acto abusivo e inesperado. Me quitaron todo sin una sola mancha en mi expediente", acusó.

Agregó que fue designado como director del CPX tras obtener el mejor puntaje en el concurso de selección del USICAMM, y que incluso este año volvió a obtener una calificación destacada para aspirar a una prórroga en el cargo. Sin embargo, el mismo día en que se dieron a conocer los resultados, personal de la Dirección General de Bachillerato (DGB) acudió al plantel a removerlo y colocar a una nueva directora.

"La comunidad respondió porque la remoción se basó únicamente en un par de quejas administrativas. Curiosamente, la DGB mandó llamar a los quejosos el 29 y 30 de mayo, justo para que coincidiera con el periodo en que nos iban a notificar", señaló.

Finalmente, acusó que su destitución responde a una persecución política y no a una evaluación objetiva de los hechos. "Hay una terrible desproporción entre los hechos de la queja y la sanción que se aplicó", concluyó.