España desmantela base del CJNG vinculada al narcotráfico global
CDMX
Fecha: 18-11-2025
La caída de una de las estructuras más relevantes del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Europa se produjo tras una operación conjunta entre la Policía Nacional de España, la DEA de Estados Unidos y autoridades de Países Bajos
La investigación, conocida como Operación Oyamel, terminó con 20 personas detenidas y el hallazgo de un sofisticado sistema para mover toneladas de droga camuflada en maquinaria industrial enviada desde Sudamérica.
La investigación comenzó a inicios de 2025, cuando los agentes detectaron que maquinaria pesada -aparentemente destinada a uso industrial- llegaba a España con compartimentos adaptados para transportar cocaína.
Ese fue el rastro que destapó el esqueleto de la operación: un empresario español, considerado uno de los blancos principales, facilitaba el ingreso del cargamento, que posteriormente era llevado a fincas en la sierra de Madrid y Ávila. La elección de esas zonas no era casual: ofrecían discreción, privacidad y espacio para almacenar grandes volúmenes de droga.
El material incautado muestra la magnitud de la red: 1.870 kilos de cocaína, 375 kilos de anfetamina, 275 mil euros (aprox. 6 millones de pesos), armas, vehículos adaptados y hasta 14 kilos de plata, además de criptomonedas por valor de 15 mil dólares (aprox. 275 mil pesos). Todo esto revela que la organización había diversificado su actividad y métodos de financiamiento
De Ávila a Italia: el puente europeo
La distribución dentro de España se coordinaba desde una finca en las inmediaciones de La Adrada, en Ávila, con rutas activas hacia Bilbao y Valencia mediante vehículos preparados con dobles fondos.
Para el tráfico internacional, la estructura tenía otro eje: varias fincas en Talavera de la Reina, donde la maquinaria era recibida, modificada y redirigida hacia Italia.
Fue ahí donde, en septiembre, se identificó un envío asociado a un capo de la camorra napolitana, del clan Amato-Pagano, confirmando que la red mexicana había tejido alianzas con el crimen organizado europeo para fortalecer sus rutas comerciales
La operación se ejecutó en dos fases para desarticular tanto el núcleo operativo como los puntos de distribución. De los 20 detenidos en Madrid, Ávila, Bilbao, Valencia y Toledo, 15 ingresaron a prisión provisional, incluidos dos personas que la DEA llevaba años rastreando como objetivos prioritarios.
El golpe final ocurrió cuando, en coordinación con Países Bajos, las autoridades interceptaron un contenedor procedente de Costa Rica cargado con droga dentro de maquinaria industrial. Con ello, se cerró un circuito logístico que había servido como puerta de entrada del CJNG en Europa.
