De acuerdo al informe del primer semestre de este 2025 del Instituto de Gestión, Administración y Vinculación Municipal, PEMEX registró a nivel nacional 11 mil 774 tomas clandestinas en ductos de hidrocarburo.
Especialistas indican que este ilícito ha evolucionado y ahora no solo se limita a la extracción de gasolina, sino que también incluye el robo de gas LP y diésel, lo que se ha denominado como "huachigas".
La entidad veracruzana, debido a su infraestructura de ductos, se ha convertido en un corredor estratégico para el tráfico ilegal de combustibles, especialmente en la zona sur. Actividad delictiva que está ligada a grupos del crimen organizado.
"También te genera otros delitos, o incluso incrementa otros delitos, como es el robo con violencia , el homicidio doloso, el robo de vehículos ", expuso Juan José Hernández, director del Instituto para la Gestión Adiministración y la vinculación Municipal.
De enero a junio de 2025 PEMEX detectó una toma clandestina en ductos de hidrocarburo cada 53 minutos 50 segundos en el país, mientras que en el territorio veracruzano se identificó una cada dos días durante el primer semestre de 2025, lo que equivale a unas 88 tomas en ese periodo, con un incremento del 76% respecto al año pasado.
En el reciente informe de Pemex presentado ante la Fiscalía General de la República (FGR) señala que entre enero y marzo de este año se localizaron 62 puntos de extracción ilegal en los oleoductos y poliductos que transportan gasolina, diésel y crudo desde Minatitlán hasta la Ciudad de México.
"Es frecuente que las bandas criminales dedicadas al huachicol, el robo de combustible, gasolina y diesel, también evolucionen y abran una ruta, una división de robo de gas LP", destacó el consultor en seguridad David Saucedo.
En el mes de junio, tras un operativo de fuerzas federales, localizaron un centro de acopio ilegal en la región de Las Vigas de Ramírez, donde aseguraron 933 mil litros de hidrocarburo y más de 60 vehículos utilizados para su traslado, considerado uno de los más grandes del año.
En ese mismo mes, se localizó una instalación clandestina en Coatzacoalcos, descrita como una "mini refinería" con capacidad para procesar miles de litros de gasolina adulterada, situación que fue minimizada.
"Quienes sabemos de esto, no es una mini refinería, es una mezcladora, porque mezclaban ahí productos, el proceso de refinación es técnico y es más largo", afirmó la gobernadora Rocío Nahle García.
En septiembre de 2025 se confirmó el arresto de 14 personas, incluyendo marinos y empresarios, implicadas en una red de contrabando de combustible, lo que visibiliza la colusión entre el crimen organizado y funcionarios del gobierno mexicano.