México desmantelado, delitos silenciosos que dañan a Xalapa

El robo de tapas de alcantarillas se ha convertido en una denuncia recurrente por parte de los ciudadanos durante años, una práctica que hasta el momento no ha sido contenida y que ha provocado accidentes con peatones y conductores, los cuales han resultado lesionados y en algunos casos, han perdido la vida.

"Sí denunciar, porque no nomás por aquí, donde quiera. En las calles también por allá está otra igual, pues es que eso está mal, por lo niños, por la gente, por los carros", son las reacciones de los ciudadanos al dar su opinión respecto a dicha problemática.

Y es que aunque las autoridades se concentran en atender los diversos ilícitos que se registran en el país, como son los de alto impacto, a la par existen otro tipo de faltas que afectan a los ciudadanos.

Caídas, lesiones, vehículos ponchados y atascados son parte de los daños colaterales que provocan estos delitos menores, "Puede ser que solamente sea una ponchadura, puede ser una volcadura, puede ser que por frenar bruscamente te alcance otro vehículo, y todo porque alguien de manera inconsciente se dio a la tarea de robarse una pieza", señala el jefe del Departamento de Movilidad del Ayuntamiento de Xalapa, Alfonso López Pineda.

El regidor xalapeño Carlos Rugerio señala que "el 40% son por este tipo de robo, lamentablemente estos hechos ocurren durante la madrugada". Los reportes de esta naturaleza se registran prácticamente de forma mensual en diferentes puntos de la ciudad, pero no suelen hacerse de manera formal, tal como señala la regidora Helen Sarmiento, "un promedio entre 5 a 7 al mes, ese es el número que tenemos".

"Mucho tiene que ver el miedo a ser identificado, a que pueda ser que alguien me vio que estoy denunciando o que conozcan a la persona y pueda haber complicidad", precisó López Pineda, respecto a los posibles factores que propician la no denuncia de estos incidentes.

Y aunque en muchos casos este tipo de robos regularmente solo termina propiciando caídas y lesiones, en algunas ciudades del país, ha cobrado la vida de personas.

Un caso de esta naturaleza ocurrió en el puerto de Veracruz en 2021, luego de que el pequeño Brian Emanuel, de 13 años de edad, cayera a un registro de CFE, recibiendo una descarga eléctrica que acabó con su vida.

Además de representar un peligro para los ciudadanos, esta situación implica pérdidas para los ayuntamientos, los cuales tienen que invertir hasta 9 mil pesos en reposiciones.

"Genera un deterioro de la economía misma de la administración municipal. Es un cargo que se tiene que hacer de manera extraordinaria porque por supuesto que cuando se hace una obra pública, se presupuesta todo lo que conlleva", señaló el funcionario municipal.

Si bien los costos por kilogramos de estos materiales no suelen ser tan altos, se tienen registros de lugares en donde el kilo se paga hasta en 30 pesos, situación que representa dinero fácil para los amantes de lo ajeno.