Zacatecas, Zac.- Las enfermedades cardiovasculares se han consolidado como la principal causa de muerte en México y Zacatecas. La falta de una cultura de prevención, una mala alimentación y la poca atención a los chequeos médicos periódicos han revelado la vulnerabilidad de la salud pública, generando una crisis silenciosa que cobra miles de vidas anualmente.
Las cifras en el estado son contundentes. El último reporte de la Secretaría de Salud de Zacatecas registró 1,503 muertes por enfermedades del corazón. Aunque esta cifra es menor al pico de 2,835 decesos alcanzado en 2021, la tendencia a la baja no oculta la gravedad del problema.
Natalia Fernández Carlos, Jefa de Departamento de Prevención y Control de Enfermedades de la Secretaría de Salud, explica que estos padecimientos incluyen el infarto agudo al miocardio y los eventos vasculares cerebrales, los cuales a menudo son consecuencia de condiciones subyacentes. "Obviamente está la hipertensión, la diabetes, que son enfermedades cardiometabólicas, que quiere decir que están relacionadas con todos estos padecimientos", señaló.
La hipertensión, uno de los principales detonantes, tiene una alta prevalencia. A nivel mundial afecta al 33% de la población y en México al 44%. En Zacatecas, aunque el porcentaje es menor (13.15%), esto se traduce en casi 30 mil personas diagnosticadas que viven con este factor de riesgo.
Uno de los mayores obstáculos para el control es la falta de detección temprana. "La gente le tiene miedo a la detección, tiene miedo a saber cómo está actualmente su salud", comenta Fernández Carlos. "No van a tomarse la presión porque piensan ?ay, no me vaya a salir algo malo?, o no se toman la glucosa por temor a salir con diabetes".
Sumado a la falta de chequeos, la mala alimentación es el otro gran pilar de esta crisis. Clara Cristina Reyna Guzmán, nutrióloga con especialidad en obesidad, advierte sobre "el abuso de los alimentos ultraprocesados porque generalmente tienen exceso de sodio, tienen grasas trans, es decir grasas no saludables, y también tienen muy poquita fibra". Entre los productos más dañinos se encuentran las galletas, botanas enbolsadas, el pan dulce y la mayoría de los enlatados.
Para mejorar la salud cardiovascular, los expertos recomiendan modificar hábitos e incrementar el consumo de fibra (frutas y cereales), Omega 3 (pescados) y antioxidantes (verduras frescas). La consulta nutricional es clave, y no solo para quienes buscan bajar de peso. "Creemos que al nutriólogo sólo tiene que ir una persona con sobrepeso, pero una persona con peso normal puede tener dislipemia, es decir, exceso de colesterol y triglicéridos", aclara Reyna Guzmán.
El costo de no prevenir es altísimo. Según el IMSS, el gasto promedio anual por un paciente con hipertensión es de $7,000 pesos y por uno con diabetes, de $14,500. Cifras que demuestran que, sin una verdadera cultura de prevención, el sistema seguirá enfocado en tratar las consecuencias en lugar de atacar la raíz del problema.