Zacatecas, Zac.- El incremento sostenido al salario mínimo ha generado efectos positivos en la población, aunque su impacto directo en la mayoría de los trabajadores continúa siendo limitado. La entidad mantiene rezagos que obligan a miles de familias a enfrentar carencias básicas.
"Es innegable que las mejoras al salario que se han dado en los últimos siete años han impactado en el ingreso de las familias, sobre todo en las de bajos ingreso, el alto número de mexicanos y de familias mexicanas que salieron de la pobreza extrema se explica en buena medida por el aumento en los salarios", explicó el docente investigador de la unidad académica de economía, José Luis Guardado.
En Zacatecas, el porcentaje de población en situación de pobreza pasó de 45.8% en 2020 a cerca de 38% en 2024, equivalente a aproximadamente 140 mil personas que abandonaron esta condición.
Sin embargo, el efecto del salario mínimo no se percibe con la misma intensidad entre quienes ganan por encima de este umbral. Mientras el incremento para 2026 será de 13%, la mayoría de los salarios medios suelen ajustarse apenas entre 3 y 5%, lo que explica la sensación de estancamiento entre amplios sectores laborales.
Aun así, la tendencia general muestra un alza en el salario promedio de cotización ante el IMSS, en Zacatecas de la población económicamente activa cerca de 190 mil ganan aún un salario mínimo, el 51% ronda los 2 salarios mínimos y solo un 5% está entre los 3 y 5 salarios mínimos.
El estado tiene actualmente alrededor de 605 mil personas en situación de pobreza y entre 115 mil y 120 mil en pobreza extrema. Este último segmento, enfrenta mayores obstáculos para incorporarse a las mejoras salariales y continúa viviendo con carencias severas.
Aunque el salario mínimo permite cubrir hoy alrededor de 1.75 canastas básicas y se proyecta que en 2026 alcance un nivel cercano a los 315 pesos diarios, aún está lejos de garantizar acceso a bienes y servicios de nivel medio. Las familias que dependen de uno o dos salarios mínimos siguen enfocadas en cubrir necesidades esenciales y no pueden acceder a gastos como vacaciones o consumo no básico.
"Creo que es un acierto pero también debe complementarse en términos generales, no nada más es el tema de subir el salario mínimo sino también darle facilidad a las empresas, quienes asumen esta responsabilidad son los empresarios", consideró el diputado local Martín Álvarez Casio.
El desafío para los próximos años será sostener la tendencia de recuperación del poder adquisitivo, mientras las empresas ajustan su productividad para absorber los incrementos sin precarizar condiciones laborales en un estado donde 44% de la población permanece en pobreza laboral.