Zacatecas, Zac.- Enfermedades que durante años se consideraban bajo control han comenzado a resurgir en comunidades y municipios de Zacatecas. En los últimos tres años, el número de padecimientos bajo vigilancia epidemiológica pasó de 16 a 114, según datos de la Secretaría de Salud del estado.
"Ahorita a la fecha estamos reportando 114 enfermedades en el estado, no es que sean nuevas sino que las estamos clasificando como es, y eso nos va dar mucho margen de solicitar medicamentos" informó Jorge Armando Solís Robles, subdirector de epidemiología, prevención y control de enfermedades.
Entre los casos identificados recientemente se encuentran registros de lepra, sarampión, tuberculosis y tos ferina, condiciones que reflejan un retroceso en el control sanitario.
A nivel mundial se tienen identificadas 547 enfermedades, la Organización Panamericana de la Salud tiene registradas 147 enfermedades bajo vigilancia; en Zacatecas se reportan 114, es decir el estado cubre aproximadamente el 77.6% de la lista, lo que indica un alto nivel de exposición a padecimientos considerados reemergentes.
Especialistas advierten que esta situación responde principalmente a dos factores. Por un lado, la baja en las tasas de vacunación, y por otro, los actuales estilos de vida, marcados por una alimentación deficiente, la falta de descanso adecuado y niveles elevados de estrés.
"México se ha relajado en los últimos años en cuanto a la compra de vacunas y hemos tenido retrasos en las vacunas, esto conlleva que haya niños, adolescentes y adultos susceptibles" detalló Carlos Gómez Rodríguez, presidente de la sociedad Zacatecana de Salud Pública.
De acuerdo a datos de la Secretaría de salud, hasta la última semana de julio en Zacatecas se tenían detectados 1 caso de lepra, 21 de sarampión, 43 de tuberculosis, la mayoría concentrados en la jurisdicción de Ojocaliente y 14 de tos ferina, enfermedades prevenibles con vacunación y que se creían controladas en su totalidad.
Las autoridades de salud han comenzado a rediseñar sus estrategias de prevención, con énfasis en la detección oportuna, el restablecimiento de programas de vacunación y la sensibilización comunitaria, sin embargo, reconocen que el reto implica también una transformación de hábitos sociales y de atención médica primaria.