No era flojera era TDAH: El despertar invisible en adultos mexicanos
13 de julio: Día Internacional del TDAH
Por años, miles de personas han vivido sintiéndose desorganizadas, dispersas, emocionalmente abrumadas sin saber que detrás de esa lucha silenciosa se esconde el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Y no, no es falta de voluntad. Es neurodivergencia.
En México, más de 2 millones de personas viven con TDAH, pero solo el 8% han sido diagnosticadas. La mayoría transita la adultez con síntomas invisibles que suelen confundirse con estrés crónico, ansiedad o "rasgos de personalidad".
¿Cómo se manifiesta el TDAH en adultos?
A diferencia de los niños, donde suele haber hiperactividad, en adultos los signos son más sutiles:
- Dificultad para concentrarse o finalizar tareas.
- Desorganización mental y física.
- Impulsividad en decisiones.
- Olvidos frecuentes.
- Cambios emocionales intensos.
- Baja autoestima y sensación de fracaso.
El entorno laboral y social no siempre entiende estas señales, generando etiquetas injustas como "perezoso", "irresponsable" o "inmaduro".
El impacto del diagnóstico tardío
Recibir un diagnóstico en la adultez puede ser un parteaguas. Le da sentido a años de lucha interna y ofrece herramientas para comenzar a cuidarse. En México, muchas personas descubren su TDAH solo cuando buscan ayuda para sus hijos y, en ese proceso, se reconocen a sí mismos.
- El 60% de los casos de TDAH persiste en la adultez.
- Sin tratamiento, aumenta el riesgo de depresión, ansiedad y consumo de sustancias.
Recursos y dónde acudir
- Psicólogos especializados en neurodivergencias.
- Clínicas públicas como CAPA (Centros de Atención Primaria en Adicciones) que también abordan salud mental.
- Asociaciones como Déficit de Atención México y Fundación CADAH.
- Herramientas digitales como apps de organización, meditaciones guiadas y test preliminares (no sustituyen diagnóstico clínico).
Llamado a la empatía
El TDAH en adultos no diagnosticados no es un fallo personal. Es una condición que merece comprensión, atención y espacios seguros. Este 13 de julio, compartamos información, abramos conversaciones y construyamos comunidades más empáticas con las neurodivergencias.