En el marco del Día del Adulto Mayor, Zamora rindió homenaje a quienes representan un pilar fundamental en las familias y en la sociedad. Se trata de mujeres y hombres que, a lo largo de los años, han compartido su experiencia, amor y sabiduría, dejando un legado invaluable que trasciende generaciones.
La celebración tuvo lugar con una serie de actividades que buscaban reconocer la importancia de este sector de la población. El evento inició con una ceremonia eucarística, donde se ofrecieron oraciones en agradecimiento por la vida y el ejemplo de las personas adultas mayores. Posteriormente, se disfrutó de un programa cultural con música en vivo, que llenó de alegría y energía el espacio destinado para la convivencia.
Como parte de la jornada, se realizaron rifas y dinámicas en las que los asistentes participaron con entusiasmo, creando un ambiente de unión y compañerismo. La comida compartida se convirtió en un momento de encuentro donde se fortalecieron los lazos de amistad y se reafirmó el reconocimiento hacia quienes han dedicado su vida a sus familias y comunidades.
Más allá de la festividad, el Día del Adulto Mayor se convierte en una oportunidad para reflexionar sobre la necesidad de seguir fomentando el respeto, el cuidado y la inclusión de las personas mayores. En Zamora, su legado es considerado motivo de orgullo y su ejemplo un recordatorio del valor que representan en la construcción de una sociedad más humana y solidaria.
El homenaje fue una manera de expresar gratitud y de reiterar que las y los adultos mayores no solo son portadores de historia, sino también de enseñanzas que siguen marcando el presente y el futuro de la ciudad.