En Zamora y la región, la inseguridad ha dejado de ser una preocupación lejana para convertirse en parte de la vida diaria, esta situación que afecta a jóvenes y adultos por igual a llevado a generar un miedo constante, esto debido al aumento que ha habido últimamente en enfrentamientos armados, las desapariciones que no cesan y a la gran cantidad de asesinatos, que ya no sorprenden, pero si generan dolor.
La comunidad menciona que salir a trabajar, ir a la escuela o simplemente caminar por la calle, representa un riesgo, muchos jóvenes cambian de rutas para llegar a sus destinos y su forma de vestir para pasar desapercibidos, las familias se preocupan diariamente porque sus seres queridos regresen a casa sanos y salvos.
Claramente la violencia esta dejando cicatrices profundas en una región que solo quiere paz, por lo que es urgente que se escuchen estas voces y se atienda a esta problemática para brindar una seguridad real y no las mentiras que se pintan, porque desde luego Zamora no es "ciudad seguridad".