La falta de interés por las actividades culturales en La Piedad vuelve a evidenciarse, esta vez durante el fin de semana pasado, cuando el escenario de SéArte se llenó de color, creatividad y alegría con la puesta en escena *Historias Pop Up*, un espectáculo diseñado especialmente para las primeras infancias.
A pesar de la calidad de la obra y de su propósito formativo, el evento contó con apenas entre 8 y 10 espectadores, una cifra que resulta lamentable considerando que este tipo de propuestas buscan acercar el arte a los más pequeños, quienes representan la base de una sociedad más sensible, crítica y consciente.
Tania Bañales, promotora cultural y directora de SéArte, expresó en su mensaje de agradecimiento a los artistas invitados que *"resulta evidente la falta de empatía por el arte, y se pierde de vista la noble estrategia de aprendizaje que significa acercar a los niños al mundo artístico"*. Añadió que, aun con estas dificultades, *"a los artistas no nos para nunca nada"*, reafirmando su compromiso por mantener viva la actividad cultural en la ciudad.
Por su parte, el actor y titiritero moreliano Carlos Alarcón reiteró la importancia de introducir a las primeras infancias al arte, ya que este contacto temprano contribuye al desarrollo emocional, cognitivo y social de niñas y niños.
La escasa asistencia registrada en esta presentación reabre el debate sobre la necesidad de promover con mayor fuerza la cultura local, así como de fomentar la participación ciudadana para aprovechar los espacios y espectáculos que se ofrecen en La Piedad.