La participación de las mujeres en áreas como la ciencia, la tecnología y, particularmente, la robótica, ha crecido de forma constante, aunque aún enfrenta desafíos importantes. La brecha de género en estos campos sigue siendo una realidad, pero cada vez son más las mujeres que se abren camino, impulsando una transformación necesaria en el ámbito académico, profesional y social.
En el caso de la robótica, por ejemplo, históricamente dominada por figuras masculinas, hoy vemos a niñas, jóvenes y profesionistas interesadas en programar, diseñar, construir e innovar. El acceso a oportunidades, la educación temprana en STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), y el impulso de políticas públicas con perspectiva de género han sido clave para este avance.
Un claro ejemplo de este progreso en Michoacán es la participación de la maestra Alejandra Ochoa Zarzosa, directora general del Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación del Estado (ICTI), quien durante un reciente encuentro académico destacó la importancia de seguir visibilizando y apoyando el papel de las mujeres en la ciencia.
"Durante años, el campo científico ha sido un espacio complejo para las mujeres. No por falta de talento, sino por falta de oportunidades. Pero eso está cambiando, y debemos seguir impulsando el talento femenino desde las aulas, los laboratorios y los centros de investigación", expresó la funcionaria.
Además de su trayectoria profesional, la maestra Alejandra se ha convertido en un referente para niñas y jóvenes michoacanas que buscan desarrollarse en áreas científicas. Su presencia al frente del ICTI no solo representa una voz experta, sino también un símbolo del avance que poco a poco se construye en el estado.
Programas, concursos, encuentros tecnológicos y redes de mentoría para mujeres en ciencia son parte de las acciones que diversas instituciones están promoviendo para equilibrar el acceso y la participación femenina en este campo.
La ciencia necesita más mujeres, y Michoacán está dando pasos firmes para lograrlo.