Productores y agricultores mexicanos anunciaron este miércoles que llegaron a un acuerdo con el Gobierno de México para fijar un precio de garantía de 6,950 pesos por tonelada para productores con hasta 20 hectáreas y un máximo de 200 toneladas.
Este entendimiento busca poner fin a los bloqueos carreteros y tomas de casetas que se mantenían en varios estados del país.
Álvaro López Ríos, secretario de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), explicó que desde la madrugada se comenzaron a levantar los bloqueos en Michoacán y Jalisco, mientras que en Guanajuato algunos productores todavía mantienen la protesta. "La gente está todavía en su derecho de exigir lo que demandaban", señaló López Ríos.
El acuerdo establece un esquema mixto de apoyos, compuesto por 6,050 pesos por tonelada aportados por el Gobierno federal y 900 pesos adicionales de los gobiernos estatales productores de maíz, alcanzando así el precio total de garantía de 6,950 pesos.

El líder campesino calificó este logro como "importante, no al cien por ciento, pero más allá de los 6,050 pesos que ofreció Julio Berdegué, secretario de Agricultura, de manera inicial. No se llega a los 7,200 que se demandaban, pero se avanza en beneficio de los productores".
Como parte del acuerdo, también se creará una comisión de ordenamiento de mercados y comercio, que permitirá definir con anticipación los precios del grano mediante negociaciones entre el Gobierno, la industria y los productores. El objetivo es reducir la incertidumbre y la especulación en el mercado del maíz.
El acuerdo pone fin a varios días de protestas en el Bajío mexicano, donde agricultores de Jalisco, Michoacán y Guanajuato bloquearon carreteras y casetas para exigir un precio justo que cubriera sus costos de producción. Los productores se vieron afectados por una caída del 20% en el precio internacional del maíz en lo que va del año.
La medida ocurre después de una serie de movilizaciones en todo el país, en las que los productores exigían fijar el precio mínimo del maíz en 7,200 pesos por tonelada. El lunes, las autoridades ofrecieron 6,050 pesos, pero esta propuesta fue rechazada y considerada una "burla" e "insulto al campo mexicano".
Con este acuerdo, se espera que se normalicen las actividades en carreteras y casetas, y que los productores cuenten con un precio de referencia más seguro, protegiendo así la economía del sector agrícola y evitando que los campesinos enfrenten pérdidas mayores ante la volatilidad del mercado internacional.