La alcaldesa Karen Bass decretó un toque de queda nocturno para una zona de aproximadamente una milla cuadrada en el centro de Los Ángeles, California. La medida entró en vigor este martes 10 de junio, desde las 20:00 horas del martes hasta las 6:00 horas del miércoles, esto debido a incidentes de saqueo y actos violentos en algunas protestas nocturnas.
Las grandes manifestaciones comenzaron tras las redadas del ICE, que según informan, estarían deteniendo hasta 2,000 personas por día, cifra muy por encima de lo habitual.
La tensión escaló con el despliegue de casi 4,000 tropas de la Guardia Nacional y 700 marines, sin el consentimiento del gobernador de California, Gavin Newsom, lo que ha desatado disputas legales entre el estado y la administración federal.
Violencia y detenciones
Se han registrado varios episodios de violencia como el saqueo de comercios (23 negocios en una sola noche), uso de gas lacrimógeno y proyectiles de goma, enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden. Se reportan al menos 7 agentes heridos.
Municipios como Chicago también han registrado protestas similares, extendiendo la movilización nacionales
El gobernador Newsom y representantes de California califican la intervención militar ordenada pro Trump como "excesiva" e ilegal. California ya interpuso un litigio contra la administración Trump por violar la soberanía estatal y presumiblemente contra la implementación de la Ley de Insurrección
El gobierno federal defiende la medida como necesaria para garantizar el orden, y sugiere que la utilización de fuerzas federales podría ampliarse si las protestas se extienden.