El gobierno de Estados Unidos anunció este jueves un aumento significativo en la recompensa ofrecida por información que conduzca a la detención del presidente venezolano Nicolás Maduro.
La cifra pasó de 15 millones a 50 millones de dólares, en un intento por intensificar la presión sobre el mandatario y su entorno.
La medida fue dada a conocer por el Departamento de Estado, que justificó el incremento ante la persistencia de Maduro en actividades consideradas ilegales por Washington, incluyendo narcotráfico, corrupción y violaciones a los derechos humanos. La recompensa busca incentivar a quienes puedan aportar datos clave para su captura y eventual enjuiciamiento.
"Estados Unidos reafirma su compromiso con la justicia y la lucha contra el narcotráfico, y seguirá utilizando todas las herramientas a su alcance para enfrentar a quienes amenazan la seguridad regional", declaró un portavoz del Departamento de Estado.
El anuncio se produce en un contexto de tensiones diplomáticas prolongadas entre Caracas y Washington, y tras varias sanciones económicas impuestas contra funcionarios y entidades vinculadas al régimen venezolano.
Por su parte, el gobierno venezolano calificó la acción como un "acto injerencista" y reafirmó que Maduro seguirá al frente del país hasta 2026, con el respaldo de las fuerzas armadas y el pueblo venezolano.
La recompensa representa una de las más altas ofrecidas por Estados Unidos en su historia reciente contra un jefe de Estado, situándola a la par de otros casos emblemáticos en la lucha contra el crimen organizado internacional.
Esta escalada en la estrategia estadounidense podría implicar un aumento en las operaciones de inteligencia y colaboración con países aliados en la región para localizar y capturar a Maduro.