El grupo islamista Hamás ha comunicado que ha dado una respuesta favorable a la última propuesta de alto el fuego en Gaza y está dispuesto a comenzar de inmediato negociaciones para implementar la tregua
Según un comunicado oficial, tras consultar con diversas facciones y fuerzas palestinas, Hamás ha mostrado su disposición para iniciar una ronda de diálogo sobre los mecanismos que permitan detener la agresión contra la población gazatí.
Esta propuesta de alto el fuego contempla una tregua inicial de 60 días, durante la cual Hamás se comprometería a liberar a la mitad de los rehenes israelíes aún vivos en Gaza, así como a entregar los cuerpos de aproximadamente 30 cautivos fallecidos.
A cambio, Israel liberaría a varios prisioneros palestinos. Además, el acuerdo incluye garantías para que ninguna de las partes retome las hostilidades mientras duren las negociaciones, que tienen como objetivo final un alto el fuego permanente y una retirada gradual y completa de las fuerzas israelíes del territorio.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el martes pasado que Israel había aceptado esta propuesta de cese al fuego de dos meses y expresó su esperanza de que Hamás también la acepte
Esta iniciativa forma parte de un plan presentado hace meses por el enviado estadounidense para Oriente Medio, Steve Witkoff, que Israel ha respaldado desde el principio. Sin embargo, Hamás había rechazado previamente esta propuesta porque no incluía la retirada israelí ni el fin de la ofensiva militar.
Según el medio israelí Ynet, Hamás solicitó algunas modificaciones menores al texto, como eliminar el mecanismo de distribución de ayuda humanitaria gestionado por la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF) y que sea nuevamente la ONU la encargada de repartir los suministros.
La guerra en Gaza ha dejado un saldo devastador: más de 57,000 palestinos han perdido la vida y más de 132,000 han resultado heridos debido a los ataques israelíes, según cifras del Ministerio de Sanidad del Gobierno de Hamás
Este conflicto prolongado ha generado una crisis humanitaria profunda, lo que hace que cualquier avance hacia la paz y la estabilización sea crucial para la región y la población civil afectada.
La disposición actual de Hamás a negociar la tregua podría abrir una ventana esperanzadora para detener la violencia y avanzar hacia una solución más duradera.