Hamás ha confirmado este 18 de agosto que acepta una propuesta de alto el fuego para la Franja de Gaza, aunque no proporcionó detalles específicos sobre los términos del acuerdo
La respuesta israelí aún está pendiente, pues hasta el momento no se ha pronunciado oficialmente sobre esta aceptación. Este anuncio sigue luego de que varios medios tanto israelíes como árabes informaran que el grupo islamista habría dado luz verde a un acuerdo parcial que incluiría la liberación de algunos rehenes y la retirada de tropas israelíes de ciertas áreas al norte y este del territorio.
El respaldo de Hamás fue comunicado en un mensaje, en el cual también se menciona que otras facciones palestinas comparten esta postura favorable hacia la propuesta. Esta iniciativa fue presentada por mediadores egipcios y cataríes, quienes han mantenido intensas reuniones para facilitar el diálogo entre las partes involucradas.
De hecho, fuentes egipcias confirmaron a medios internacionales que el consentimiento del grupo armado se dio tras encuentros directos entre sus representantes presentes en Egipto y los facilitadores de ambas naciones.
El contenido del plan de tregua contempla la suspensión de las operaciones militares del grupo en Gaza durante un período de 60 días. A cambio, Hamás liberaría a 10 rehenes israelíes y permitiría la entrada masiva de ayuda humanitaria para mitigar la grave crisis social y sanitaria que atraviesa la población local
De acuerdo con declaraciones provenientes de fuentes egipcias, el acuerdo también implicaría que Israel facilite el paso seguro de convoyes con suministros y retire a sus fuerzas militares de algunas zonas que ocupó tras fracasar el anterior intento de alto al fuego en marzo.
No obstante, no se han especificado cifras ni detalles sobre cuántos prisioneros palestinos podrían ser liberados por Israel en contraprestación, un punto que permanece difuso y sin confirmación oficial.
A raíz de este anuncio, el ministro israelí de Defensa, Israel Katz, afirmó que la disposición de Hamás para regresar a la mesa de negociación responde principalmente a la presión causada por la amenaza de una posible invasión de la ciudad de Gaza por parte de Israel.
Por su parte, el primer ministro Benjamín Netanyahu expresó que el grupo enfrenta una "presión inmensa" en este momento crítico