El asesinato de una madre y sus tres hijas, dos gemelas de 11 años y una niña de 9, ha causado conmoción en Hermosillo, Sonora, luego de que sus cuerpos fueran hallados este fin de semana en los alrededores de la comunidad Miguel Alemán, a unos 50 kilómetros de la capital del estado.
La principal línea de investigación es el feminicidio por violencia familiar, según informó la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES).
Los hechos se desarrollaron en dos días. El viernes 4 de julio, peritos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal encontraron el cuerpo sin vida de una mujer con signos de violencia como golpes y heridas en el rostro.
Un día después, el sábado por la mañana, una llamada anónima alertó al colectivo Buscadoras por la Paz sobre la presencia de otros tres cuerpos, que resultaron ser los de las hijas de la víctima.
Cecilia Delgado, líder del colectivo, narró que al llegar al sitio encontraron una escena desgarradora: las dos niñas mayores abrazaban a su hermana menor como si intentaran protegerla. "Esa triste imagen la tendré en mi mente siempre", dijo. Las menores fueron asesinadas a tiros y aún vestían pijamas cuando fueron localizadas.
La Fiscalía estatal confirmó el parentesco entre las víctimas y aseguró que continuará con una investigación exhaustiva. Aunque se mantienen abiertas todas las líneas de investigación, se considera como hipótesis principal un caso de feminicidio vinculado a violencia familiar o doméstica.
La noche del domingo 6 de julio, las autoridades informaron que la Policía investigadora había detenido a la pareja sentimental de la madre como principal sospechoso del crimen. La Fiscalía señaló que el detenido está relacionado con una organización criminal dedicada a la distribución de drogas en la capital del estado y que se están integrando pruebas científicas al caso.
La familia vivía en el barrio Tierra Nueva, una zona marginada al norte de Hermosillo, considerada foco rojo por la alta incidencia de violencia familiar y delitos relacionados con el consumo de alcohol y drogas. Las condiciones de inseguridad en la zona agravan la situación que enfrentan muchas mujeres y niñas en contextos de vulnerabilidad.
Este caso se suma a una ola de violencia que atraviesa Hermosillo. En tan solo los primeros cinco días de julio, se han registrado más de 17 ejecuciones en la ciudad, al menos cinco de ellas con víctimas mujeres jóvenes o menores de edad. La tragedia ha reavivado la exigencia de justicia y protección para mujeres y niñas en todo el país.