Las redadas migratorias en ciudades santuario como Los Ángeles han encendido protestas masivas. En respuesta, el presidente Donald Trump amenaza con aplicar una medida extrema: la Ley de Insurrección.
¿En qué consiste y por qué genera tanta controversia? Aquí te lo contamos.
Para entender de qué trata esta ley, primero hay que definir qué es una insurrección. Este término se refiere a levantamientos o rebeliones contra un gobierno o autoridad establecida, generalmente de forma violenta y organizada.
Pueden tener un carácter político, social o militar, y su objetivo suele ser derrocar al gobierno o cambiar la situación política existente.
Con eso claro, veamos qué dice esta ley y cómo se ha aplicado en la historia de Estados Unidos. Es una ley que permite al presidente desplegar tropas dentro del país para sofocar insurrecciones o hacer cumplir la ley cuando las autoridades locales se ven rebasadas.
Es decir, una especie de "ayuda extra" enviada desde el gobierno federal, aunque su uso está reservado para situaciones consideradas como emergencias nacionales
Esta permite al Presidente suspender temporalmente el Acta Posse Comitatus, que prohíbe generalmente la participación militar en el enforcement de la ley civil. Esto se hace bajo tres secciones principales:
Esta ley se creó en 1792 y fue actualizada en 1807 y 1871
Su uso fue especialmente relevante durante el periodo de reconstrucción, posterior a la Guerra Civil, cuando se buscaba reintegrar a los estados del sur a la Unión, reconstruir la economía y garantizar los derechos de los afroamericanos liberados tras la abolición de la esclavitud.
Durante esta etapa, los esfuerzos por establecer igualdad legal para los afroamericanos se enfrentaron a una fuerte resistencia y, aunque se lograron avances importantes en derechos civiles, los resultados fueron limitados y en muchos casos temporales.
Pero no todo es blanco y negro: el Brennan Center for Justice y otros expertos legales han advertido que esta ley deja demasiado poder en manos del presidente, sin supervisión real del Congreso ni de los tribunales
Esta ley solo puede ser invocada por el presidente, y ha sido invocada al menos 20 veces en 230 años, de acuerdo a Brennan Center for Justice, estos lugares son:
Aunque su uso ha sido históricamente limitado, la amenaza de invocar esta ley en un contexto de protesta social por derechos migratorios despierta preguntas incómodas: ¿se está usando una herramienta pensada para la guerra civil para responder a la desobediencia civil? ¿Dónde trazamos la línea entre orden y represión?