La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó que cinco mexicanos fueron detenidos durante las redadas migratorias realizadas el fin de semana en Carolina del Norte, en Estados Unidos.
La mandataria explicó que el consulado general de México en Raleigh ya está en contacto con ellos para ofrecer asistencia legal y acompañamiento, con el fin de garantizar que sus derechos sean respetados.
Sheinbaum reiteró que su Gobierno dará seguimiento a cada caso y aseguró que la protección de los mexicanos en el exterior es una de las prioridades del Gobierno federal. Recordó que, ante cualquier operativo migratorio en Estados Unidos, los consulados activan protocolos de emergencia para atender a quienes puedan resultar detenidos.
La confirmación ocurrió después de que autoridades migratorias estadounidenses realizaran la operación "La telaraña de Charlotte", un despliegue que dejó al menos 81 personas detenidas, entre ellas mexicanos y hondureños.
Este operativo comenzó el sábado y fue encabezado por la Patrulla Fronteriza en Carolina del Norte, un estado donde viven cerca de 1 millón de inmigrantes, de los cuales más de una quinta parte son mexicanos. Esto significa que, por cada 10 inmigrantes en la región, al menos dos son de origen mexicano.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) señaló que las redadas se enfocan en "criminales extranjeros ilegales" que supuestamente buscan protección en jurisdicciones con políticas santuario. Incluso mencionó que casi 1,400 órdenes de detención migratoria no se han cumplido. Como ejemplo, una orden de detención ocurre cuando un juez pide que una persona permanezca bajo custodia por violar leyes migratorias, aunque no tenga un delito penal.
Sin embargo, el gobernador de Carolina del Norte, Josh Stein, contradijo esta versión al afirmar que "la vasta mayoría" de los detenidos por la Patrulla Fronteriza y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) no cuentan con condenas criminales. Stein pidió a la población grabar el actuar de los agentes federales y mantener las protestas de forma pacífica, como ya ocurrió el fin de semana con manifestaciones en distintas zonas de Charlotte.
En redes sociales se viralizó el caso de Willy Aceituno, un ciudadano estadounidense nacido en Honduras, quien denunció que agentes migratorios rompieron la ventana de su auto y lo tiraron al suelo pese a tener documentos en regla. El DHS respondió que Aceituno mostró "un comportamiento errático" y que un agente incluso resultó herido durante el operativo cuando otro ciudadano chocó su vehículo.
Las redadas en Charlotte se suman a operativos recientes en otras ciudades. Antes de este caso, la Patrulla Fronteriza participó en acciones similares en Los Ángeles, en junio, y Chicago, en septiembre, como parte de una estrategia federal para reforzar la vigilancia migratoria en centros urbanos de Estados Unidos.