La Casa Blanca difundió este martes la imagen de un Labubu, un muñeco chino de colección de la marca Pop Mart, inspirado en Cristian Soto Galeano, un migrante guatemalteco deportado recientemente por "comportamiento indecente".
La publicación, compartida a través de las cuentas oficiales de la administración estadounidense, generó de inmediato reacciones encontradas. Para algunos, el gesto fue interpretado como una muestra de "humor político" y una manera de abordar con ironía la crisis migratoria; para otros, se trató de un acto "insensible" y "deshumanizante" hacia los miles de migrantes que enfrentan procesos de deportación en Estados Unidos.
El personaje, con la característica estética grotesca de los Labubu: orejas puntiagudas, sonrisa burlona y mirada caricaturesca, fue presentado como parte de una edición especial que, según funcionarios, pretende "visibilizar las complejidades de la migración". Sin embargo, asociaciones defensoras de derechos humanos denunciaron que el mensaje estigmatiza a las comunidades migrantes.
"Convertir la historia de un ser humano en un juguete coleccionable es una falta de respeto a quienes sufren el drama del desplazamiento", señaló en un comunicado la organización Migrant Justice Network.
La Casa Blanca no aclaró si la pieza será puesta a la venta o si se trató únicamente de una estrategia comunicacional.
Mientras tanto, en redes sociales la polémica continúa: algunos coleccionistas celebraron la rareza de la figura, mientras activistas pidieron a la administración Trump retirar la publicación y ofrecer disculpas públicas.