¡Precaución! Se esperan lluvias, calor y fuertes vientos

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) alertó que este 22 de julio se esperan lluvias muy fuertes, altas temperaturas y vientos intensos en buena parte del país, lo que podría generar riesgos para la población.

Las autoridades llaman a estar atentas a los avisos oficiales y seguir las indicaciones de Protección Civil.

Según el reporte matutino del SMN, se pronostican lluvias muy fuertes, de entre 50 y 75 milímetros, en estados como Chihuahua, Coahuila, Durango, Veracruz, Tabasco, Oaxaca y Chiapas. Además, habrá precipitaciones fuertes en Sinaloa, Zacatecas, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Guerrero, Puebla y la península de Yucatán. En contraste, en entidades como la Ciudad de México, Baja California Sur y Tamaulipas solo se esperan lluvias ligeras.

Estas lluvias podrían provocar deslaves, aumento en el nivel de ríos y arroyos, así como inundaciones en zonas bajas. Por ello, las autoridades piden a la población extremar precauciones y estar informadas mediante fuentes oficiales.

En cuanto a las temperaturas, continuará un ambiente muy caluroso, especialmente en el norte del país, la costa del Pacífico y la península de Yucatán. Se esperan máximas de 40 a 45 grados Celsius en zonas del noreste de Baja California, sureste de Baja California Sur, norte de Sinaloa, noroeste de Chihuahua y oriente de Nuevo León. Otros 17 estados podrían alcanzar entre 35 y 40 grados.

También habrá vientos con rachas de hasta 70 km/h en entidades como Coahuila, Nuevo León y el istmo de Tehuantepec, en Oaxaca. En otras regiones, como el golfo de California y varios estados del centro y sureste del país, las rachas podrían alcanzar entre 40 y 60 km/h, con posibles tolvaneras en Baja California. En el golfo de Tehuantepec se prevé oleaje elevado de hasta 2.5 metros.

Estas condiciones están siendo generadas por diversos fenómenos meteorológicos, entre ellos el monzón mexicano, una circulación ciclónica en altura, canales de baja presión en distintas regiones del país e inestabilidad atmosférica combinada con aire húmedo del mar Caribe y el golfo de México.