La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el primer ministro de Canadá, Mark Carney, lanzaron un llamado urgente para que Estados Unidos respete el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ante la amenaza real de aranceles del 35% a Canadá y del 30% a México impuestos por la administración de Donald Trump.
En una llamada telefónica, ambos líderes coincidieron en que estos impuestos pondrían en grave riesgo la estabilidad y competitividad económica de América del Norte, un bloque que ha crecido y prosperado gracias al comercio libre y las reglas claras establecidas por el T-MEC.
La imposición de estos aranceles no sólo elevaría los precios de los productos en la región, sino que también podría afectar a miles de empresas y millones de empleos que dependen del flujo comercial entre los tres países, generando incertidumbre entre inversionistas y consumidores.
Durante la reciente Cumbre del G7 en Kananaskis, México y Canadá acordaron reforzar su alianza comercial para hacer frente a estas presiones y trabajar juntos en la próxima revisión del T-MEC, prevista para 2026, con el objetivo de fortalecer las reglas y evitar que se fracturen las relaciones económicas.
Mark Carney tiene previsto visitar México para continuar con estas negociaciones y coordinar estrategias conjuntas que eviten que Estados Unidos aplique medidas unilaterales que dañen la economía regional.
La presidenta Sheinbaum y Carney coincidieron en que la defensa del T-MEC es vital para proteger la competitividad de América del Norte y garantizar un comercio justo y estable, clave para el crecimiento y bienestar de millones de personas.
El futuro del tratado dependerá de cómo evolucione esta confrontación, pero la unión de México y Canadá demuestra la voluntad de mantener un bloque sólido que resista las amenazas y preserve la prosperidad compartida en la región.