Trump niega acobardarse al aplazar aranceles internacionales
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este miércoles que no se está acobardando frente a los recientes aplazamientos en la imposición de aranceles a la Unión Europea.
Durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca, el mandatario explicó que estas decisiones forman parte de su estrategia de negociación y no deben interpretarse como señales de debilidad.
Trump respondió así a una pregunta sobre el término "TACO trade", que circula en algunos sectores de Wall Street y que significa "Trump Always Chickens Out" ("Trump siempre se acobarda", en español). Esta expresión hace referencia a los constantes cambios en la política arancelaria del presidente y sus efectos en los mercados internacionales.
"No se llama acobardarse. Se llama negociar", declaró Trump de forma tajante. Como ejemplo, mencionó que impuso un arancel del 50% a la Unión Europea, lo que provocó una respuesta inmediata de sus representantes: "Ellos llamaron y dijeron: Por favor, reunámonos ahora mismo. Y yo les dije: De acuerdo, les doy plazo hasta el 9 de julio".
El presidente se mostró molesto con el periodista que usó el término y afirmó que su objetivo es lograr acuerdos más favorables para Estados Unidos. "Lo triste es que ahora, cuando llegue a un acuerdo con ellos que sea algo mucho más razonable, van a decir: Se acobardó, se acobardó. Es increíble", lamentó.
El término "TACO trade" fue acuñado por primera vez en una columna del Financial Times a inicios de mayo, y desde entonces ha sido utilizado por analistas para describir la incertidumbre que generan los anuncios arancelarios del presidente en la economía global.
Con este tipo de declaraciones, Trump busca reafirmar su estilo de negociación agresivo, argumentando que sus tácticas de presión han logrado poner a países como los de la Unión Europea en la mesa de diálogo. "Tú llamas a eso acobardarse... yo lo llamo estrategia", reiteró.
El republicano concluyó reprochando al periodista por lo que consideró una pregunta "desagradable", pero aseguró que continuará usando las herramientas comerciales como parte clave de su política exterior y económica.
