El gobierno de Venezuela anunció la activación de nuevos ejercicios militares en el norte del país, bajo la hipótesis de una posible "agresión militar" de Estados Unidos
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, informó que las maniobras forman parte del llamado Plan Independencia 200, desplegado este miércoles en los estados de Carabobo y La Guaira, zonas estratégicas frente al mar Caribe.
Durante una transmisión por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), Padrino López aclaró que no busca generar alarma, pero sí "imprimir realismo" ante lo que calificó como una amenaza concreta del imperialismo norteamericano.
"Como líder militar debo suponer siempre la peor hipótesis", declaró el ministro, al subrayar que la conducta de Estados Unidos "no es normal" y que el país debe prepararse para escenarios extremos.
Según el funcionario, Washington intenta "forzar un cambio de régimen" en Caracas mediante la "fabricación de mentiras" y el despliegue naval y aéreo en el Caribe, lo que calificó como parte de una estrategia de presión
Contexto diplomático tenso
Las declaraciones de Padrino López se producen pocos días después de que The New York Times reportara que el presidente Donald Trump habría ordenado suspender los acercamientos diplomáticos con Venezuela, instruyendo a su enviado especial, Richard Grenell, a detener los esfuerzos para alcanzar un acuerdo político.
No obstante, el presidente Nicolás Maduro restó importancia al informe y aseguró que el diálogo con Estados Unidos sigue siendo posible, pese al ambiente de confrontación.
Venezuela busca adelantarse "dos pasos"
El ministro aseguró que los ejercicios buscan mantener a las fuerzas armadas "dos o tres pasos adelante" de cualquier intento de agresión, reforzando la capacidad operativa del país ante un eventual conflicto.
Con este anuncio, Caracas vuelve a colocar el tema militar en el centro del discurso político, en un momento de incertidumbre diplomática y alta tensión en el Caribe.