 
                                    A nueve días que falleciera la menor de 5 años por picarle un alacrán en la escuela que estudiaba, representantes de instituciones administrativas, de salud y educativas coinciden que deben de existir responsabilidades compartidas por la muerte de la menor. Sin embargo, el caso sigue en investigación por la FGR y la FGJE.
El pasado lunes 20 de octubre, los menores salieron al recreo en el jardín de niños "Ignacia E. de Amante", ubicado en el centro de Hermosillo. Mientras los pequeños se divertían, una niña de 5 años, fue picada por un alacrán.
La menor fue trasladada al Hospital de Ginecopediatría del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en donde no contaban con el antídoto, porque se habían utilizado en fin de semana previo en pacientes que fueron picados por alacranes. Los directivos del nosocomio lograron obtener la dosis en el Hospital Infantil del Estado de Sonora. Aunque la niña recibió el tratamiento, lamentablemente se complicó su estado de salud y falleció.
Porfirio Peña Ortega, comisionado de Arbitraje Médico del Estado de Sonora, dijo que la falta de sueros o antídotos en las instituciones médicas puede deberse a múltiples causas, desde fallas en la gestión administrativa hasta problemas de distribución o producción por parte de los proveedores. Además, existen convenios interinstitucionales entre hospitales para solicitar los medicamentos de emergencia cuando alguno no los tiene disponibles.
"Esta tragedia no puede atribuirse a un solo responsable, sino que involucra una cadena de factores institucionales, administrativos y preventivos que fallaron", señaló.
El comisionado consideró que la complicación del estado de salud de la menor puede deberse a factores biológicos y de tiempo de atención, ya que, en niños, el veneno circula más rápido y causa efectos más severos.
Señaló que la atención no debe dirigirse solo al IMSS, sino también en la falta de acciones preventivas dentro de las instituciones educativas y de salud, haciendo énfasis que el jardín de niños estaba cerca de dos hospitales a los cuales no se canalizó a la menor al más cercano si se trataba de una emergencia.
"Son muchos los factores también que pueden condicionar que un paciente fallezca. Va a depender del tipo de alacrán, de la madurez del veneno del alacrán, si es un alacrán joven, de la profundidad que inyectó el veneno, de la cantidad y sobre todo en la zona. Entonces todos esos factores lamentablemente jugaron en contra de la pequeñita", indicó.
Agregó que es necesario la limpieza y fumigación en las escuelas, para evitar la proliferación de fauna nociva que pone en riesgo la vida de la planta estudiantil.
Según datos públicos de la Plataforma de Monitoreo de Medicamentos del Gobierno de México, el 18 de julio el IMSS-Bienestar en Sonora solicitó al Laboratorio Silanes mil 275 dosis de fabenoterápico polivalente antialacrán o fragmentos F(AB)2 de inmunoglobulina antialacrán, 250 dosis de faboterápico polivalente antiviperino, 450 dosis de faboterápico polivalente o monovalente antiarácnido y 5 dosis polivalente anticoralillo, las cuales no llegaron.
El presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia, Cecilio Luna Salazar, aseveró que el personal actuó conforme a los protocolos internos establecidos, que indican se debe notificarse al 911 y al C5i antes de trasladar al alumno a una institución médica.
Señaló que las normas de actuación dentro de las escuelas son precisas y deben respetarse en todo momento, por lo que las decisiones sobre el traslado o atención médica de un estudiante dependen de dichos lineamientos y de la autorización de los padres de familia, en este caso, no se llevó a la menor a clínicas privadas cercanas, ya que se siguieron los pasos oficiales previstos en los procedimientos de emergencia.
"Lo que sí te digo es de que si se están siguiendo los protocolos y existe un protocolo cuando hay una situación de emergencia, en este sentido, de picadura de alacrán o alguna otra emergencia en alguna de las escuelas. Se siguen los protocolos, se habla al 911 y se consulta también al padre o a la madre de familia para proceder en consecuencia", indicó.
El dirigente insistió en que los planteles cuentan con seguros escolares y con protocolos diseñados para responder a cualquier situación de emergencia, pero reiteró la importancia de que los padres mantengan actualizados sus datos de contacto, para que sean avisados de inmediato y puedan autorizar cualquier acción médica cuando sea necesario.