La industria del mezcal en México, va a alza, tan solo Oaxaca está produciendo anualmente 13.8 millones de litros certificados, de los cuales el 70 por ciento se va a la exportación, a Estados Unidos y al mercado asiático, lo que implica una derrama de más de 8 mil millones de pesos.
No obstante, el vertiginoso crecimiento ha desatado tensiones ambientales, como la extracción de más de 50 millones de litros de agua anuales para cocer agave ha dejado sin suministro vital a comunidades; y el vertido de 70 millones de toneladas de vinazas sin adecuado tratamiento ha contaminado ríos y suelos agrícolas.
Más de 200 comunidades productoras en Tlacolula, Yautepec, Ocotlán, Ejutla, Miahuatlán y Sola de Vega sostienen su economía e identidad en torno al cultivo y la destilación del agave. Santiago Matatlán, reconocida como la "Capital Mundial del Mezcal", destaca por la calidad artesanal de sus destilados y su tradición ancestral.
Sin embargo, los productores tradicionales enfrentan dificultades para competir con grandes marcas, mientras la sobreproducción de agave ha desplomado los precios, afectando a quienes preservan los métodos originales. La Norma Oficial Mexicana 070 ha permitido la entrada de productos adulterados, agravando la situación de los artesanos.
A esto se suma el conflicto interno en el Consejo Regulador del Mezcal (COMERCAM), cuyas disputas por el liderazgo han generado incertidumbre en la certificación y exportación, afectando principalmente a los pequeños productores.
A pesar de estos retos, Oaxaca tuvo una destacada participación en la Feria Internacional de Turismo (FITUR) 2025 en Madrid, donde propuso su afiliación a la Organización Mundial del Turismo y promovió su mezcal artesanal con degustaciones y más de 5,000 piezas de material publicitario, fortaleciendo su presencia internacional.