La mañana del 11 de julio del presente año, frente al Palacio de Gobierno de Oaxaca, el ingeniero José Luis Hay Hay ofreció un comunicado para denunciar el despido de su hija, Aracely Hay Urrutia, por parte de Petróleos Mexicanos (PEMEX). El denunciante afirmó que la separación laboral, ocurrida el pasado 6 de junio, careció de justificación y presentó irregularidades en el procedimiento, por lo que solicitó una revisión minuciosa del caso.
Durante su intervención, también exigió avances en la investigación del fallecimiento de su otra hija, Abigail Hay Urrutia, ocurrido tiempo atrás y que, según dijo, sigue sin resolverse. Acusó omisiones en las indagatorias y pidió a las autoridades estatales y federales que el hecho no quede impune.
Por su parte, Aracely Hay Urrutia, excolaboradora de la Unidad de Administración y Servicios T.I. en San Martín Texmelucan, Puebla, expuso en una carta dirigida a la presidenta de México que su plaza fue otorgada por instrucción presidencial anterior como apoyo familiar, debido a la trayectoria de su padre en la empresa y como parte de una reparación moral por el caso de su hermana.
La extrabajadora solicitó ser considerada en el actual proceso de reestructuración, argumentando que su despido vulnera sus derechos laborales y desconoce la aportación que su familia ha hecho a la empresa. El ingeniero reiteró su llamado a las autoridades para que ambos casos reciban atención rápida, transparente y sin favoritismos.