El paro de transporte público anunciado para este lunes 1 de septiembre en el Estado de México fue suspendido de manera temporal, luego de que concesionarios y autoridades estatales acordaron instalar una mesa de diálogo a las 9:00 de la mañana. La medida, de haberse concretado, habría afectado a más de un millón de usuarios en el Valle de Toluca y el área metropolitana.
En total, 33 empresas transportistas habían confirmado su participación en la suspensión del servicio como forma de presión para exigir un aumento a la tarifa de pasaje, que actualmente se ubica en 12 pesos. Los concesionarios plantean llevarla a 16 pesos, al argumentar que los costos de operación ?combustible, refacciones, pago de seguros y mantenimiento? se han incrementado de manera sostenida en los últimos años.
Mejor frecuencia de autobuses esta madrugada
La Secretaría de Movilidad reiteró que no se ha autorizado un alza y que cualquier modificación debe ser analizada en función del impacto social y de la calidad del servicio. Según cifras oficiales, más del 40% de las unidades en circulación superan los 15 años de antigüedad, lo que genera quejas constantes por deficiencias en seguridad y comodidad.
En un recorrido realizado durante la madrugada de este lunes se constató que, si bien el paro no se llevó a cabo, el flujo de autobuses fue menor al habitual y la frecuencia en varias rutas se redujo, lo que ocasionó tiempos de espera más largos para los pasajeros.
La mesa de diálogo instalada este lunes definirá si se avanza en un acuerdo sobre la tarifa o si persiste el riesgo de un paro generalizado en los próximos días, lo que podría afectar la movilidad de trabajadores, estudiantes y comerciantes en pleno regreso a clases.