Lo que en su momento parece una decisión estética sin mayores consecuencias puede transformarse, años después, en un problema de salud grave
Durante años, miles de personas han intentado mejorar su cuerpo, ya sea para cumplir con los estándares de belleza impuestos por la sociedad o por motivos personales. El problema surge cuando, ante lo costoso de los procedimientos formales, se opta por alternativas más baratas y aparentemente seguras.
Lo que muchos no saben es que esos cambios pueden desatar una batalla silenciosa dentro del cuerpo: inflamación, dolor, fatiga e incluso enfermedades graves, todo como consecuencia de una sustancia que nunca debió ser inyectada.
El IMSS advierte: inyectarse aceites minerales u otras sustancias no reguladas con fines estéticos es peligroso y puede causar daños permanentes en la salud
¿Qué son los adyuvantes y por qué causan tanto daño?
Un adyuvante es una sustancia que estimula la respuesta del sistema inmune.
Aunque tiene aplicaciones en medicina, su uso con fines estéticos está prohibido, ya que puede provocar una inflamación crónica en el cuerpo.
Cuando se inyecta aceite mineral en zonas como glúteos, piernas o senos, pueden pasar entre cinco y diez años antes de que aparezcan los primeros síntomas, los cuales van desde molestias físicas hasta enfermedades graves.
Síntomas comunes que pueden aparecer años después:
En casos avanzados, incluso puede haber insuficiencia renal, úlceras infectadas y riesgo de muerte
¿Qué es el síndrome ASIA?
Es el nombre corto para Síndrome Autoinmune Inducido por Adyuvantes, una enfermedad descrita internacionalmente en 2011.
En México, fue el Hospital de Especialidades del CMN La Raza el primero en documentar su variante causada por aceite mineral.
Desde entonces, ha liderado la atención médica, quirúrgica y psicológica para pacientes que, sin saberlo, se inyectaron una sustancia prohibida
¿Quiénes están en mayor riesgo?
¿Qué recomienda el IMSS?
El deseo de modificar el cuerpo no debería poner en riesgo la salud. Lo que empieza como una mejora estética, si se hace con sustancias ilegales y sin supervisión médica, puede convertirse en una enfermedad de por vida.