Jiménez del Teul, Zac. El pasado miércoles 6 de agosto, autoridades de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), entre ellas el director estatal Víctor Manuel Reyes Rodríguez, sostuvieron una reunión a puerta cerrada con párrocos locales y el presidente municipal, Daniel Cisneros Esparza, en un nuevo intento por destrabar el controversial Proyecto Milpillas.
De acuerdo con organizaciones comunitarias y la Red Mexicana de Afectadas y Afectados por la Minería (REMA), el encuentro tuvo como objetivo solicitar el respaldo de las autoridades eclesiásticas y municipales para convencer a la población de aceptar un proyecto largamente rechazado por diversas comunidades de la región, quienes aseguran que la iniciativa responde a intereses políticos y económicos del gobierno estatal, encabezado por David Monreal.
Las críticas hacia el proyecto se intensificaron al señalar que dicha reunión se llevó a cabo sin consultar ni informar a los ejidos directamente afectados, quienes han manifestado en reiteradas ocasiones su rechazo a la construcción de la presa a través de asambleas agrarias.
Según REMA, diversas autoridades de distintos niveles han visitado recientemente a las comunidades ofreciendo reparación de carreteras, instalación de servicios básicos y apoyos económicos, todos condicionados a la aceptación del proyecto. "Hace una década dijeron lo mismo, y cuando el proyecto fracasó, se olvidaron de sus promesas", afirmaron a través de un comunicado.
Ante la falta de resultados, ahora denuncian que se recurre a influencias religiosas para lograr el respaldo que no se ha conseguido con estrategias políticas. Las organizaciones exigen a la presidenta Claudia Sheinbaum que honre su compromiso de no imponer el proyecto si las comunidades lo rechazan.