Una comerciante de Durango denunció un cobro que calificó como injustificado por parte del comité organizador de la Feria Nacional Villista. La mujer, quien instaló un puesto de venta de elotes preparados durante los festejos fundacionales, afirmó que al término del evento se le impidió retirar sus pertenencias hasta cubrir un pago de 2,500 pesos por concepto de energía eléctrica.
De acuerdo con su testimonio, en años anteriores el pago por este servicio había sido de 200 pesos, por lo que consideró que el aumento era desproporcionado. La comerciante relató que al acudir a las oficinas del comité para buscar una explicación y negociar el monto, no fue recibida por los responsables.
La afectada explicó que el cobro se le notificó hasta el momento en que intentó desmontar su puesto, lo que le impidió retirar mobiliario y equipo de trabajo. Esta situación la obligó a dejar sus pertenencias en el lugar mientras analiza las acciones legales que podría emprender para recuperar sus bienes.
El caso generó comentarios entre otros expositores, quienes señalaron que no se les informó previamente de un incremento en la tarifa eléctrica y que no hubo comunicación clara sobre los costos adicionales. Algunos participantes indicaron que la feria es un espacio importante para el comercio local, pero advirtieron que cobros imprevistos pueden desalentar la participación en futuras ediciones.
Hasta el momento, el comité organizador no ha emitido una postura oficial sobre el incremento en el cobro ni sobre los procedimientos para notificar a los comerciantes. Tampoco se ha aclarado si se trata de una tarifa general para todos los expositores o de un caso particular.
La denuncia se suma a otras que, en ediciones pasadas, han hecho comerciantes locales sobre condiciones y costos de participación en eventos públicos. Organizaciones de vendedores han señalado la necesidad de reglas claras y tarifas fijas que permitan planificar gastos y evitar conflictos al final de las actividades.