Las personas con discapacidad visual enfrentan barreras físicas que ponen en riesgo su integridad e incluso su vida.
Estas tienen que ver con la falta de acceso a edificios, calles y espacios públicos debido a la ausencia de rampas, ascensores o señalización adecuada.
"La ley que protege los derechos de las personas con discapacidad visual establece que las autoridades, tienen la obligación particularmente las municipales tienen que generar las condiciones adecuadas para que ellos no corran ningún riesgo".
Se estima que en el estado de Colima hasta el 2020 había 3 mil 860 personas con discapacidad visual, se trata de un sector que ha sido abandonado por las autoridades, pues la mayoría de banquetas y vialidades tienen obstáculos, las superficies son irregulares y ninguna cuenta con señalización táctil.
"¿qué puede pasar? caídas, puede pasar que se bajen de las banquetas y puedan ser atropellados, o incluso, golpeados por bicicletas, motocicletas y últimamente patines electrónicos que sabemos andan a toda velocidad sin ninguna regulación".
Según especialistas, debe existir sensibilidad por parte de la autoridad para garantizar el derecho a la ciudad y a un entorno seguro, que cuente con infraestructura apta y sin riesgos, mucho menos cuando se trata de un sector vulnerable.
"principalmente por el departamento de obras públicas, haga una revisión de las calles // también es importante una semaforización adecuada para esta debilidad visual, las rampas entre una esquina y otra deben estar acondicionadas".