La expansión de tiendas de origen chino en municipios como Vicente Guerrero, Pueblo Nuevo y Poanas ha generado preocupación entre los organismos empresariales de Durango. De acuerdo con Sergio Sánchez López, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CANACO), este fenómeno ya está afectando directamente las ventas del comercio establecido en esas regiones.
Sánchez López hizo un llamado a las autoridades correspondientes para que revisen a fondo la operación de estas cadenas extranjeras, las cuales ?dijo? están desplazando a negocios tradicionales sin que exista claridad sobre sus procesos de instalación, régimen fiscal o cumplimiento de normas locales.
Por su parte, Raúl Montelongo Nevárez, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), advirtió que por cada tienda asiática que se instala, el impacto puede extenderse a por lo menos 100 pequeños negocios locales, muchos de los cuales podrían verse obligados a cerrar.
Ambos dirigentes coincidieron en que esta tendencia amenaza directamente la subsistencia del comercio tradicional, compuesto en su mayoría por micronegocios familiares que no cuentan con la capacidad de competir en precio ni en volumen con las cadenas extranjeras.
Montelongo señaló que la entrada de estos comercios no ha sido acompañada por esquemas de regulación claros ni mecanismos de supervisión fiscal o comercial, lo que genera una competencia desigual y afecta la economía de cientos de familias que dependen del comercio local.
Aunque no se han dado a conocer cifras oficiales sobre cuántas tiendas chinas operan actualmente en los municipios mencionados, los organismos empresariales aseguran que el crecimiento ha sido acelerado en los últimos meses, lo que ha encendido alertas en distintas regiones del estado.
El sector empresarial pide al Gobierno del Estado y a los ayuntamientos involucrarse, revisar permisos, verificar el cumplimiento de la normatividad y diseñar estrategias que protejan al pequeño comercio ante un fenómeno que podría seguir extendiéndose si no se actúa a tiempo.